Da tu apoyo a Chisland! Desactiva tu bloqueador de publicidad o haz una donación para el mantenimiento del foro! Cualquier cifra vale, puedes leer más información aquí
Pues os traigo algo que no es música, sino la primera de una serie de conferencias de la historiadora Eva Tobalina sobre los pueblos peninsulares de la antigüedad. Esta es la primera y trata sobre Tartessos:
Es lo que estoy escuchando (bueno, ahora mismo no, que estoy en el trabajo).
Muy buen canal de divulgación. Hace meses que he dejado bastante de lado canales sobre actualidad y política, me he hecho seguidor de varios de historia y ciencia para escuchar en los ratos libres y creo que es de las mejores decisiones que he tomado.
Aprovecho para recomendar éste, que es el que más sigo
No me prodigo mucho por este hilo, pero la ocasión lo merece. 22 añitos tiene el colega, y es capaz de esta barbaridad. Eso del Síndrome de Stendhal siempre me pareció una gilipollez, y sin comerlo ni beberlo el gilipollas soy yo llorando como un imbécil. El disco entero es una maravilla. Es Cohen, es Waits, es Elliot Smith, pero sobre todo, es Cameron Winter
El hijo de puta saca el álbum ("Heavy Metal", no, no busquéis ese estilo por ningún lado) en puto diciembre. Y menos mal, porque si lo saca antes se lleva el álbum del año de todas las revistas, webs y otras bestias similares. ¡¡Que tiene 22 años y escribe así!!
“Today
I met who I’m gonna be
from now on,
and he’s a piece of shit”
En serio, estoy totalmente obsesionado con este disco
Es realmente bueno, Tracke. Le seguiré la pista. Hoy donde todo suena estándar y andrógino (en el mal sentido, no en el de Bowie, The Cure o Culture Club) tener personalidad propia vale ORO
Cuando el estilo o la ortodoxia son elementos secundarios subyugados al mensaje yo más que de artistas o cantantes suelo referirme a ellos como trovadores
Silvio, Battiato, Kiko Veneno o Bob Dylan, por decirte cuatro muy evidentes, son de esa naturaleza. Benditos seáis mil veces, versos sueltos.
Venga, pondremos algo de Silvio que siempre es buen momento
Era gitano y aquí va pregonando camarones en una canción de amor
Crawfish se llama el tema. Y se queda más ancho que Pancho
En La ragazza del elevatore le endiña al italiano con infinito gamberrismo. Uno de los temas que más lo retrata.
Qué personaje más singular. Se casó en la dictadura con la hija de un diplomático inglés, como entonces las mujeres eso de tener cuenta corriente lo llevaban mal cada primero de mes estaba en el banco para trincar lo que le mandaban a la parienta y con un colega se recorría los aeropuertos de toda Europa (como Sheldon con los trenes) bebiéndose todos los Duty Free hasta que se les acababa el dinero y se volvía.
Y era tan silvestre y a la vez tan devoto que en sus conciertos veías a los punks más sucios y a los capillitas más guapeados convivir en paz y entregarse a tope. Silvio se bebía Sanlucar del primer buche y Jerez del segundo (aunque era más de brandy y coñac) y siempre fue un maldito entre malditos. Pero su talento, amics, en determinados aspectos (como el blues del tren) estaba por encima de iconos tan consagrados como Elvis.
Cum Sancto Spiritu - Misa en si menor - Shuprimo el Yojansebastian
ACDC, la primera de Mahler, el ocaso de los dioses y la cabalgata de las valkirias wagneriana o la heroica de Beethoven son cosas tela de épicas que no son recomendables para conducir. Porque se te va el pie en el coche y la mano en la moto
Pero escuchando a Bach también se podían invadir países. Es difícil saber si "mejor" pero, seguro, "antes"
Claudio Monteverdi - "Vespro della Beata Vergine" (1610) - Ensemble Pygmalion
con sus subs en español y todo, how cool is that?
Joer qué puta maravilla
Ya lo he comentado más de una vez. La misa en si menor de Bach o el Mesias de Handel son obras que en literatura equivaldrían a un Hamlet o a un Quijote. Pero mi obra sacra favorita ever no es protestante. Es la católica e italianísima "Vísperas de la Virgen beata" de Claudio Monteverdi, inventor de una cosa llamada ópera. Opinable 100%, cuestión de gustos y estilos porque a estas alturas la excelencia está garantizada.
Hasta hoy mi versión favorita, porque ahora me lo tengo que pensar mucho, era la de I Barrochisti con el coro de la radio Suiza y el calvo Diego Fasolis meneando las manos (en este repertorio no se usa apenas el palito, que no existía entonces tampoco).
Aquí la orquesta y coro son el más que solvente Ensemble Pygmalion dirigido por el enfant terrible Raphaël Pichon.
Este chaval es un portento. Ahorita mismo es la máxima autoridad sobre un zagal llamado Yojansebastian Bach. Y verlo dirigir es la mar de divertido y pedagógico. Le pone el alma.
A mi siempre me suena un poco agabachado, en el mal sentido del término. Esa languidez de los francos me carga mucho. Pero, a diferencia de todos (menos de Minkowski con los músicos del Louvre), usa esos recursos solo cuando tocan.
La parte vocal es una pasada. Tanto la soprano como el tenor González Toro en el Nigra Sum sientan cátedra sobre ortodoxia canora. Esto lo puede superar solo, y tengo mis dudas, los eternos Tallis Scholars. Y hay una coherencia increíble. En las partes solistas la emisión es con el vibrato natural pero en las corales lo anulan en la medida de lo posible para que las voces empasten mejor unas con otras. Y se gustan, y lo disfrutan. Esto no va de dar las notas solo. Hay que vivirlo.
Y eso me lleva de nuevo a Rafaelillo. Que consiga un sonido limpio y único es relativamente fácil, que todos sus gestos e indicaciones vayan cargados de intención, musicalidad y humanidad ya no es tan fácil. Pero lo realmente absurdo es su nivel de comprensión. Se supone que para dirigir ciertas cosas has de tener al menos cuarenta años (así lo dijo Wagner con sabiduria sobre su Parsifal) porque si no te has enamorado, desenamorado, vivido y muerto varias veces simplemente NO vas a comprender la obra.
¿Cómo puede ser que un payo que casi comienza a afeitarse entienda hasta el detalle más nimio de una obra tan ciclópea y vasta? ¿Cómo es posible que use los silencios de la partitura de manera tan sabia y expresiva? Algunas veces LOS SILENCIOS SON ATRONADORES. Y no, no me contradigo. Si has vivido una procesión de Semana Santa de verdad (da igual si crees o no, son territorios comunes) sabrás de que hablo.
Al principio en el "Deus in adjutorium meum intende" pensaba que los tempos iban a ser lentos y contemplativos. Error. Su concepción global es coherente y cargada de sentido, lo que pasa es que el chaval tiene mucha más sangre en las venas que los centroeuropeos que levantan mucho la nariz (te estoy mirando a tí, Herreweghe. Y a ti también te tengo controlao, Koopman) y matiza y modula con mucha más frescura y con lo que le va saliendo en ese momento de lo que viene siendo el nardo.
A veces, cuando se le pilla el punto, has de anular la capacidad de pensamiento y simplemente dejarte llevar por las musas.
No tengo formación ni vocabulario como para hacer de crítico musical en cosas tan serias. Y me la suda porque la vergüenza era verde, un día me quedé sin fumeque y la lie en un papelillo. La música nació porque no todo se puede expresar con palabras, no esperen que con palabras la explique del todo. Uno hace lo que buenamente puede y al que no le guste que rellene un formulario y le devuelvo el dinero
Comentarios
Es lo que estoy escuchando (bueno, ahora mismo no, que estoy en el trabajo).
Además, que sobre los elamitas no hay demasiada divulgación, siendo como fueron tan importantes en la historia de la civilización.
Aprovecho para recomendar éste, que es el que más sigo
“Today
I met who I’m gonna be
from now on,
and he’s a piece of shit”
En serio, estoy totalmente obsesionado con este disco
Cuando el estilo o la ortodoxia son elementos secundarios subyugados al mensaje yo más que de artistas o cantantes suelo referirme a ellos como trovadores
Silvio, Battiato, Kiko Veneno o Bob Dylan, por decirte cuatro muy evidentes, son de esa naturaleza. Benditos seáis mil veces, versos sueltos.
Era gitano y aquí va pregonando camarones en una canción de amor
Crawfish se llama el tema. Y se queda más ancho que Pancho
En La ragazza del elevatore le endiña al italiano con infinito gamberrismo. Uno de los temas que más lo retrata.
Qué personaje más singular. Se casó en la dictadura con la hija de un diplomático inglés, como entonces las mujeres eso de tener cuenta corriente lo llevaban mal cada primero de mes estaba en el banco para trincar lo que le mandaban a la parienta y con un colega se recorría los aeropuertos de toda Europa (como Sheldon con los trenes) bebiéndose todos los Duty Free hasta que se les acababa el dinero y se volvía.
Y era tan silvestre y a la vez tan devoto que en sus conciertos veías a los punks más sucios y a los capillitas más guapeados convivir en paz y entregarse a tope. Silvio se bebía Sanlucar del primer buche y Jerez del segundo (aunque era más de brandy y coñac) y siempre fue un maldito entre malditos. Pero su talento, amics, en determinados aspectos (como el blues del tren) estaba por encima de iconos tan consagrados como Elvis.
Cum Sancto Spiritu - Misa en si menor - Shuprimo el Yojansebastian
ACDC, la primera de Mahler, el ocaso de los dioses y la cabalgata de las valkirias wagneriana o la heroica de Beethoven son cosas tela de épicas que no son recomendables para conducir. Porque se te va el pie en el coche y la mano en la moto
Pero escuchando a Bach también se podían invadir países. Es difícil saber si "mejor" pero, seguro, "antes"
Crawfish xDDDD la madre que le trujo
Claudio Monteverdi - "Vespro della Beata Vergine" (1610) - Ensemble Pygmalion
con sus subs en español y todo, how cool is that?
Joer qué puta maravilla
Ya lo he comentado más de una vez. La misa en si menor de Bach o el Mesias de Handel son obras que en literatura equivaldrían a un Hamlet o a un Quijote. Pero mi obra sacra favorita ever no es protestante. Es la católica e italianísima "Vísperas de la Virgen beata" de Claudio Monteverdi, inventor de una cosa llamada ópera. Opinable 100%, cuestión de gustos y estilos porque a estas alturas la excelencia está garantizada.
Hasta hoy mi versión favorita, porque ahora me lo tengo que pensar mucho, era la de I Barrochisti con el coro de la radio Suiza y el calvo Diego Fasolis meneando las manos (en este repertorio no se usa apenas el palito, que no existía entonces tampoco).
Aquí la orquesta y coro son el más que solvente Ensemble Pygmalion dirigido por el enfant terrible Raphaël Pichon.
Este chaval es un portento. Ahorita mismo es la máxima autoridad sobre un zagal llamado Yojansebastian Bach. Y verlo dirigir es la mar de divertido y pedagógico. Le pone el alma.
A mi siempre me suena un poco agabachado, en el mal sentido del término. Esa languidez de los francos me carga mucho. Pero, a diferencia de todos (menos de Minkowski con los músicos del Louvre), usa esos recursos solo cuando tocan.
La parte vocal es una pasada. Tanto la soprano como el tenor González Toro en el Nigra Sum sientan cátedra sobre ortodoxia canora. Esto lo puede superar solo, y tengo mis dudas, los eternos Tallis Scholars. Y hay una coherencia increíble. En las partes solistas la emisión es con el vibrato natural pero en las corales lo anulan en la medida de lo posible para que las voces empasten mejor unas con otras. Y se gustan, y lo disfrutan. Esto no va de dar las notas solo. Hay que vivirlo.
Y eso me lleva de nuevo a Rafaelillo. Que consiga un sonido limpio y único es relativamente fácil, que todos sus gestos e indicaciones vayan cargados de intención, musicalidad y humanidad ya no es tan fácil. Pero lo realmente absurdo es su nivel de comprensión. Se supone que para dirigir ciertas cosas has de tener al menos cuarenta años (así lo dijo Wagner con sabiduria sobre su Parsifal) porque si no te has enamorado, desenamorado, vivido y muerto varias veces simplemente NO vas a comprender la obra.
¿Cómo puede ser que un payo que casi comienza a afeitarse entienda hasta el detalle más nimio de una obra tan ciclópea y vasta? ¿Cómo es posible que use los silencios de la partitura de manera tan sabia y expresiva? Algunas veces LOS SILENCIOS SON ATRONADORES. Y no, no me contradigo. Si has vivido una procesión de Semana Santa de verdad (da igual si crees o no, son territorios comunes) sabrás de que hablo.
Al principio en el "Deus in adjutorium meum intende" pensaba que los tempos iban a ser lentos y contemplativos. Error. Su concepción global es coherente y cargada de sentido, lo que pasa es que el chaval tiene mucha más sangre en las venas que los centroeuropeos que levantan mucho la nariz (te estoy mirando a tí, Herreweghe. Y a ti también te tengo controlao, Koopman) y matiza y modula con mucha más frescura y con lo que le va saliendo en ese momento de lo que viene siendo el nardo.
A veces, cuando se le pilla el punto, has de anular la capacidad de pensamiento y simplemente dejarte llevar por las musas.
No tengo formación ni vocabulario como para hacer de crítico musical en cosas tan serias. Y me la suda porque la vergüenza era verde, un día me quedé sin fumeque y la lie en un papelillo. La música nació porque no todo se puede expresar con palabras, no esperen que con palabras la explique del todo. Uno hace lo que buenamente puede y al que no le guste que rellene un formulario y le devuelvo el dinero